El suicidio

El suicidio es el acto radical por el que una persona de forma deliberada se provoca la muerte, como una medida para eliminar un sufrimiento psicológico intolerable.

En este artículo intentamos mostrar información acerca de la conducta suicida para que padres o tutores sepamos identificar las señales de alerta y saber cómo actuar ante estas.

Podemos identificar algunas señales de alerta:

• Pensamientos suicidas o antecedentes de intentos de suicidios anteriores.
• Problemas de comunicación, depresión, ansiedad, trastornos bipolares o conducta antisocial.
• Baja autoestima, autolesiones o alto nivel de impulsividad.
• Abuso de drogas, peleas dentro del entorno familiar, maltrato psicológico o abusos sexuales
• Excesivas demandas de los padres, rigidez familiar.
• Aislamiento social
• Enfermedad física: alteraciones metabólicas y dolor crónico.
• Perdida personal: fallecimiento, separaciones.
• Nuevas circunstancias: Cambio de ciudad, cambio de instituto.
• Capacidad limitada en la resolución de problemas.

Una de las decisiones más difíciles para una persona que ha intentado suicidarse es hablar del tema con sus seres queridos.  Lo importante es que se sienta lo más cómodo posible y eviten juzgarle o sermonearle. Ya que tras un intento de suicidio hay probabilidad de otro.

Cómo ayudar a la persona:

• Hablar del tema abiertamente.
• Explicarle que quieres ayudarlo, que es importante para ti.
• Controlar los medicamentos que haya en casa.
• Reconoce sus capacidades y su potencial.
• Al principio es importante estar mucho tiempo acompañando a la persona.
• Es totalmente necesario un tratamiento psicológico y/o psiquiátrico.

Cuando ocurre algún intento de suicidio ya sea de un ser querido, en el ámbito escolar o de trabajo debemos estar preparados para saber sobrellevar la situación, debemos:

• Tener teléfonos de emergencia (112, 061).
• Si la conducta suicida está relacionada con bullying, explicar a los alumnos que la inducción al suicidio es un delito penal que investigaría en su caso la policía judicial.
• Limitar el acceso a posibles medios lesivos.
• Mejorar las habilidades de comunicación: preguntar y escuchar.
• No dejarle solo.

Ante cualquier intento de suicidio o reconocimiento de estas señales de alerta lo más recomendable es acudir a un especialista, la ayuda psicológica será indispensable para lograr evitar cualquier intento de suicidio.